«5.878 pasos» Pieza realizada para el Centro de Arte Medioambiental Valdelarte

«Observa profundamente la naturaleza y entonces lo comprenderás todo mejor»

«Look deeply into nature and then you will understand everything better»

Albert Einstein

PROYECTO RESIDENCIA VALDELARTE. FEBRERO 2020

COMISARIA Verónica Álvarez ( AQUÍ texto elaborado por ella sobre la obra)

“5.878 pasos” No es una obra previamente preconcebidas, si no que se construye con el acto de caminar. Cada paso se convierte en pincelada de la obra, la cuál, de manera orgánica se desvela poco a poco a través de la lectura del Territorio. Se trata de trayectos físicos y mentales, en los que se busca y/o anhela el equilibrio entre el humano y la naturaleza, la materia y el espíritu, el centro y la periferia,…y de esta manera se conforma el cuerpo de la obra cuyo eje central es la búsqueda de armonía, estado opuesto al desasosiego que genera el humano en la urbe.

«Nacemos con todo lo que necesitamos» dice el budismo, y desde la ciencia sabemos que todo lo creado, desde las estrellas a los humanos son la misma materia. Esta conexión, esta red invisible que todo lo conecta es lo experimentado en esta pieza. Durante seis días he recorrido desde el perímetro al centro y todos los caminos trazados dentro del bosque de Valdelarte contando en cada trayecto los pasos dados. En un proceso que va de lo físico a lo mental, con una mirada nítida, con una observación profunda que conecta cada extremo.

Desvelar el pensamiento profundo que no se deja ver… sólo cuando un rayo de luz penetra y por unos instantes nos muestra su forma para volver a desaparecer… pensamiento efímero difícil de fijar. Una labor de conexión, rayos de pensamiento que se propagan una y otra vez, una y otra vez, una y otra vez…

Como en toda mi obra de la acción nace la obra. En este caso, la acción de caminar el perímetro le secunda la acción de recolectar cortezas de alcornoque en el trayecto. Con ellas construyo una estructura que contiene la idea de cabeza. De esta manera se nacen los binomios perímetro/ centro y cuerpo/ cabeza.

Una primera “cabeza” es desplazada conmigo al llegar a Valdelarte, se trata de un ovillo de seda blanca. El lugar donde quiero instalar esta pieza es el centro. Para hallarlo les pregunto a Manuel y Verónica ¿cuál es el centro de Valdelarte? para Manuel el centro es el lugar donde convergen los caminos y donde además hay las mejores vistas. Verónica en cambio se basa más en lo físico del terreno para darme su respuesta. Finalmente es el centro de Manuel el elegido para seguir desarrollando la pieza por englobar en ella tanto lo físico como lo emocional. Es en este centro donde realizo la acción de desovillar el ovillo trazando cuatro recorridos basados en los puntos cardinales. En el primer trayecto cuento con mis pisadas la longitud del ovillo para traducir el total de pisadas del perímetro a lo que yo considero la cabeza, el centro. Así de las 5.878 pisadas contadas del perímetro/cuerpo pasan a 29,6868687 cabezas/ centro. Al sumar los números de cada cifra aparecen los números 10 en la primera y 6 en la segunda. En simbología el número 1 es la unidad, el 0 el vacío y el 6 la mente, los cuales parecen conectar cada uno de ellos con las partes que presentan. Son seis los puntos que establezco para partir en cada trayecto: Puerta de Entrada, Casa Thoreau, Centro, Cueva- Manantial, Árbol-Nido y Puerta de Salida. Como describo más arriba en cada uno de estos trayectos cuento mis pasos y como acabo de hacer sumo las cifras consiguiendo los números: 8, 4 y 7. Volviendo a la simbología cada uno de estos números significan lo infinito o eterno, la Tierra y lo que enlaza lo divino y lo humano.

Y así concluye la lectura del territorio de Valdelarte que nos lleva desde el acto de caminar y redimensionar el territorio a escala humana, a la unidad y el vacío, a la mente y su dualidad, al infinito y a la tierra que pisamos, culminando con el enlace de lo divino con lo humano. Parece, que ese anhelo o búsqueda de la que parte la obra, ha sido encontrada en su transitar.